El caso de Juana Rivas continúa siendo ejemplo de la violencia que ejerce el sistema patriarcal judicial machista.

Este 22 de julio de 2025, un juez de Granada ha aplazado hasta el viernes 25 la entrega de su hijo menor, Daniel (11 años), a su padre, Francesco Arcuri.

El aplazamiento llega después de que el niño se negara a viajar y se resaltaran “circunstancias observadas” por el equipo del Punto de Encuentro Familiar, que desaconsejaron ejercer “ningún tipo de fuerza física o coacción” .

El discurso del menor es desgarrador: Daniel ha enviado una carta a la ministra Sira Rego, pidiendo ayuda porque está “aterrorizado” y narrando “episodios graves y recurrentes de violencia”.

En paralelo, el Tribunal Constitucional ha inadmitido el recurso de Juana Rivas para suspender la entrega, alegando que no se agotaron todas las vías judiciales.

El padre, Arcuri, está pendiente de juicio en Cagliari el 18 de septiembre, acusado de maltrato grave y habitual a los hijos .

Desde FEMEN continuamos insistiendo en premisas muy básicas: un maltratador nunca es buen padre, la justicia patriarcal pone en peligro a lxs menores y las madres protectoras deben ser escuchadas y amparadas por la ley y las instituciones.

El grito y la lucha de Juana Rivas ha sido y continúa siendo la de tantas madres que huyen desesperadamente de la violencia machista.