Esta semana, el Ministerio de Igualdad ha facilitado los datos oficiales de feminicidios en lo que llevamos de 2022, siendo la primera vez se incluyen en el recuento aquellos asesinatos cometidos fuera del ámbito de la pareja. España se ha convertido así en el primer país del mundo con una estadística oficial en la que se reflejan todos los feminicidios, que quedarán recogidos en cinco categorías: feminicidio en la pareja o expareja, feminicidio familiar, feminicidio s3xual, feminicidio social y feminicidio vicario.
Aparecen así en los recuentos los asesinatos a mujeres a manos de hombres que forman parte de su entorno familiar, aquellos asesinatos vinculados a las vi0lencias s3xu4les fuera del ámbito de la pareja, aquellos llevados a cabo por hombres que pueden ser desconocidos, y aquellos en los que se asesina a una mujer como instrumento para causar daño a otra mujer.
Incluir esta nueva información en los recuentos oficiales es un gran avance, ya que dar visibilidad a una realidad tan grave como la de los feminicidios responde a una demanda histórica del feminismo por poner sobre la mesa la realidad detrás de la vi0lencia que enfrentamos las mujeres. Sin embargo, los datos ponen de manifiesto una vez más el enorme trabajo que nos queda por hacer y la magnitud de la lucha que nos ocupa.
Tan solo en el último semestre, ha habido 19 asesinato a mujeres fuera del ámbito de la pareja o expareja (11 feminicidios familiares, 6 sociales y 2 s3xuales). Todas las víctimas conocían a su agresor, que en la mayoría de los casos era un hijo, nieto o vecino. Casi el 60% de las mujeres asesinadas superaban los 60 años y solo 2 de ellas habían puesto denuncias previas. A ellas hay que sumar además las 29 mujeres asesinadas por su pareja o expareja en lo que va de año, ascendiendo el número de este tipo de víctimas a 1.159 desde 2003, cuando empezó a hacerse este recuento.
Conocer estos datos nos permite entender mejor cuál es la realidad detrás de la vi0lencia hacia las mujeres.Nos ayuda a alejarnos de la idea preconcebida de la mujer asesinada por su marido en el ámbito doméstico y observar con amplitud la realidad de una emergencia social.
Vivas nos queremos.